Por Claudio Path. Guiarte.com, 11/01/2020
Las columnas de humo se alzan hasta más de 15 kilómetros de altura, y la tierra en su rotación las esparce por el planeta.
Imágenes de la NASA permiten contemplar el dramático espectáculo que esta impactando negativamente sobre una amplia gama de ecosistemas australianos, desde las montañas hasta la costa, incluyendo selvas tropicales y templadas de inmenso valor ecológico.
Datos de la entidad conservacionista WWF indicaban que la superficie quemada asciende ya a casi 10 millones de hectáreas. Y lo más inquietante es que la temporada de incendios se prevé larga, porque estamos a la mitad de la misma.
Esas mismas fuentes indicaban que tal vez más de 1.250 millones de animales han muerto o resultado heridos en estos siniestros. Entre ellos multitud de koalas, canguros y otras especies icónicas.
Samantha Vine, Jefa de Conservación de BirdLife Australia, señaló que ya en 2008, Australia encargó un informe al científico Ross Garnaut sobre los impactos del cambio climático en el país. El mismo predijo que las temporadas de incendios forestales de Australia se alargarían progresivamente y serían más intensas, y que los impactos serían observables para 2020. Por desgracia, aquellas y otras predicciones han demostrado ser correctas.
Al menos 26 personas han muerto en Nueva Gales del Sur, Victoria y Australia del Sur, y miles de casas y edificios han sido destruidos. Nueva Gales del Sur y Victoria son los territorios más azotados. WWF estima el daño será inmenso en especies emblemáticas de la fauna australiana como canguros, wallabies, ratas-canguro o cacatúas.
Muchas especies han perdido importantes hábitats de reproducción y alimentación y ahora se enfrentan al hambre. Entre ellas algunas en estado de peligro de extinción, cuyo futuro es muy dudoso. Una de estas aves es el mielero regente (Anthochaera phrygia), considerado en peligro critico, y en cuya defensa se estaba trabajando, dada su rareza y declive. Otra ave que puede haber sido dramáticamente afectada es el picocerdas oriental (Dasyornis brachypterus) que resistía –en peligro critico- en unas contadas zonas, que han padecido fuegos esta temporada.
En el caso de los koalas se destaca que dada su vinculación a los bosques de eucaliptus, sus lentos movimientos y su declive poblacional, en estos siniestros pueden haber muerto decenas de miles de ejemplares. Un duro golpe para este marsupial.
Las esperanzas de mejora para la situación en los próximos días son escasas. La climatología no aventura el fin de la catástrofe. Mientras, bomberos de Estados Unidos, Canadá y Nueva Zelanda acuden a Australia para reforzar los parques de extinción del país, en el que arrecia la demanda de actuaciones para limitar los efectos del cambio climatico.
Imagen de la tierra quemada y columnas de humo de los fuegos en Isla Canguro, al sur de Australia. Imagen de earthobservatory.nasa.gov
Las columnas de humo ascienden desde la costa sureste de Australia, en el entorno de Sídney, y se extienden sobre el Mar de Tasmania. Imagen https://earthobservatory.nasa.gov/
El mielero regente (Anthochaera phrygi) en Peligro crítico, ha sido afectado por los incendios de Australia. Imagen Valentín / Flickr/BirdLife