Guiarte.com. Gland, Suiza, 13/12/2019
Entre las escasas mejoras está la referida al Rascón de Guam, ave que anteriormente se daba como “Extinta en Estado Silvestre”.
Pero sólo es una gota de esperanza en el desierto de la catástrofe. La Lista Roja de la UICN incluye ahora 30.178 especies amenazadas de extinción, y los efectos negativos del cambio climático son cada vez más evidentes. En total, en la Lista Roja, se analiza el estado de 112.432 especies.
Entre las especies emblemáticas que entran en peligro critico, está la nacra, un enorme molusco bivalvo del familia Pinnidae, una especie de mejillón gigante, que alcanza hasta 1,2 metros de largo y que declina en el Mediterráneo, afectada por un parásito. Otra mala noticia para el entorno del Mediterráneo es la progresiva desaparición del conejo europeo, muy afectado por una enfermedad hemorrágica.
Según la doctora Grethel Aguilar, Directora General Interina de la UICN, esta es una “luz de esperanza en medio de la crisis de la biodiversidad”. “Hemos visto verdaderos deterioros en 73 especies, pero también hemos visto diez especies con mejorías reales. Las historias demuestran que la naturaleza se recupera cuando se le da la oportunidad”
Para Jane Smart, Directora Mundial del Grupo de Conservación de la Biodiversidad de la UICN. “la actualización revela los impactos cada vez mayores de las actividades humanas en la vida silvestre”
Los éxitos de conservación
La última actualización de la Lista Roja de la UICN revela mejoras reales en el estado de ocho especies de aves y dos especies de peces de agua dulce. La cría en cautividad, combinada con una gestión cuidadosa de las poblaciones silvestres, ha sido clave para estos éxitos de conservación.
Entre estas mejoras se encuentra el Rascón de Guam (Hypotaenidia owstoni), un ave no voladora, la segunda en la historia en recuperarse después de ser declarada “Extinta en Estado Silvestre”, después del Cóndor de California (Gymnogyps californianus). Una vez común en la isla de Guam, en el Pacífico, sus poblaciones se redujeron después de la introducción accidental de la Culebra arbórea café (Boiga irregularis), al final de la Segunda Guerra Mundial. En 1987, este depredador invasor acabó con el último Rascón de Guam.
Gracias a un programa de cría en cautividad de 35 años, el Rascón de Guam se ha establecido en la vecina Isla de Cocos. Sin embargo, el ave sigue clasificada como “En Peligro Crítico”, a tan sólo un paso de la extinción.
En la isla Mauricio, la Cotorra de Mauricio (Psittacula eques) continúa su recuperación gracias a los esfuerzos de conservación, incluyendo un programa de cría en cautividad muy exitoso. En la actualidad hay más de 750 cotorras de Mauricio en la naturaleza, y con esta actualización la especie ha sido reclasificada como “Vulnerable”, tras su mejora de “En Peligro Crítico” a “En Peligro” en 2007.
Dos especies de peces de agua dulce australianos, la Trucha bacalao (Maccullochella macquariensis) y el Galaxias pedderensis, también han mejorado, de “En Peligro” a “Vulnerable” y de “En Peligro Crítico” a “En Peligro”, respectivamente. Décadas de acciones de conservación se han centrado en el establecimiento de subpoblaciones adicionales a través de reintroducciones y translocaciones entre poblaciones salvajes.
Los efectos del cambio climático
El cambio climático ha contribuido a la disminución de especies, incluidos varios peces de agua dulce y el Tiburón nodriza de cola corta, tributario de los arrecifes. Las evaluaciones de esta actualización muestran que el cambio climático afecta a las especies, por ejemplo, alterando los hábitats y aumentando la intensidad y frecuencia de los fenómenos meteorológicos extremos.
Esta actualización de la Lista Roja revela que el 37% de las especies de peces de agua dulce de Australia están amenazadas de extinción, de las cuales al menos el 58% afectadas directamente por el cambio climático. Los peces son muy sensibles a las sequías extremas causadas por la disminución de las precipitaciones y el aumento de las temperaturas. El cambio climático también agrava la amenaza de las especies exóticas invasoras, que pueden ocupar nuevas zonas a medida que cambian la temperatura y los caudales de agua.
Nativo del Océano Índico occidental, el Tiburón nodriza de cola corta (Pseudoginglymostoma brevicaudatum) ha disminuido en aproximadamente un 80% en los últimos 30 años. Simultáneamente afectado por la pesca no controlada y el cambio climático, ha pasado de “Vulnerable” a “En Peligro Crítico”.
Al vivir únicamente en aguas poco profundas donde no tiene refugio frente a la pesca, este tiburón está perdiendo su hábitat debido a la degradación de los arrecifes de coral causada, en parte, por el calentamiento de los océanos.
El cambio climático también amenaza el ave nacional de Dominica, el Loro imperial (Amazona imperialis). Mientras que los huracanes ocurren naturalmente en el Caribe, su mayor frecuencia e intensidad resultan en una alta mortalidad de aves y en la destrucción de hábitats, junto con impactos devastadores en las personas. La especie pasó de “En Peligro” a “En Peligro Crítico” después del Huracán María en 2017, el huracán más fuerte registrado en la historia de la isla. Se estima que actualmente quedan menos de 50 individuos maduros en la naturaleza.
Los eucaliptos
Todas las especies de eucaliptos conocidas en el mundo han sido evaluadas en esta actualización de la Lista Roja, revelando que casi el 25% están amenazadas de extinción.
De los 826 eucaliptos, incluyendo los grupos Eucalyptus, Corymbia y Angophora, 812 ocurren únicamente en Australia. Son especies clave, que definen el paisaje de todo el continente australiano. Los eucaliptos, incluyendo Eucalyptus moluccana, clasificado como “Vulnerable”, son la única fuente de alimento para el Koala (Phascolarctos cinereus), que ha disminuido significativamente debido a la pérdida de los hábitats de eucalipto.
En otras partes del mundo los eucaliptos pueden ser calificados como muy invasivos, pero en su área de distribución nativa, en Australia, afrontan amenazas derivadas del uso humano de los suelos, especialmente la agricultura y la urbanización. Esto ha dado lugar a un descenso de las poblaciones de al menos un 30% para 134 eucaliptos, como Eucalyptus rhodantha, que ha disminuido en más de un 50%. La minería también amenaza a algunas especies de distribución restringida, como Eucalyptus purpurata, clasificado como “En Peligro Crítico”.
Los hábitats críticos para la conservación se limitan a áreas a la orilla de ríos, bordes de carretera y algunos potreros donde, a menudo, permanecen unos árboles solitarios.
Un rascón de Guam (Hypotaenidia owstoni), ave que ha dejado de estar desaparecida en estado libre. © Greg Hume/UICN
Flores del eucaliptus miniata, eucalipto nativo de la franja norte de Australia. Carla Perkins/UICN.
La nacra un enorme molusco bivalvo del familia Pinnidae, una especie de mejillón gigante, declina en el Mediterráneo © Arnaud Abadie/UICN
El conejo Europeo está en franco declive en el sur de Europa. © Mathias Appel/UICN
El eucalipto arcoíris, que se cultiva en jardines y parques tropicales y subtropicales, está disminuyendo peligrosamente, talado para la industria papelera. © Thomas Caldwell/UICN