Astorga, abril de 2011
El acto, celebrado en el Museo Romano, contó con la intervención del alcalde de Astorga, Juan José Alonso Perandones; el director gerente de Everest, Miguel López Varela, y el propio autor.
El libro, editado por Everest, es un texto sumamente divulgativo, escrito para aquellos lectores que quieren entender algo más del mundo del arte, y a los que se explica la evolución de las creaciones artísticas, acercándolos a modelos cercanos, básicamente de León y de la propia ciudad de Astorga
Tomás Alvarez recalcó que la oferta artística de León y Astorga tienen una magnífica complementaridad, lo que las hace ser ciudades excelentes para conocer el arte de todos los tiempos, desde la romanidad hasta nuestros días, y gozar de una gastronomía extraordinaria, en la que confluyen los sabores y saberes de toda España.
Recordó uno de los textos de la “Guide du gastronome en Espagne”, de Raymond Dumay, editado en París en 1970, que dice que la gastronomía española nació del “pacto de Astorga”.
El gastrónomo francés señala metafóricamente que los maragatos entendieron desde la Edad Media, que había que sustituir la palabra guerra por la de gozo y felicidad, y para eligieron la mesa, dijo Alvarez.
“Nosotros, maragatos, iletrados y sin patria, que no sembramos trigo ni cazamos... que no conocemos el ragut y comemos ayudados de nuestros dedos... hemos decidido ponernos al servicio de la única fuerza de paz que conocemos, la gastronomía, sin otros aliados que nuestras bestias, las mulas. Hemos decidido que habrá una gastronomía española, única, desde los pirineos a Sevilla, Valencia y Salamanca... y si es necesario la haremos nosotros solos”, escribió Dumay.
Añadió Alvarez que gentes como Raymond Dumay o Alejandro Dumas fueron capaces de ver en Astorga una esencia que se proyecta por todo el país, un patrimonio de historia y cultura que debe ser aprovechado para el desarrollo del territorio.
Destacó que a veces nos maravillamos al ver ciudades como Pisa o Siena, y no vemos lo nuestro; en el caso de Astorga recomendó recrearse en el arte renacentista de Gaspar Becerra, en la portada barroca de la catedral y en los espacios luminosos del Palacio de Gaudí, entre ellos la capilla, verdadera catedral por su grandiosidad y delicadeza.
“Con modelos así, he querido llevar al lector al conocimiento del arte; pero no se trata de un análisis localista de León o Astorga, sino arte en general”, dijo Alvarez.
“Viendo la bóveda del Panteón Real –agregó- no vemos León, sino vemos la cultura mundial del Románico; describiendo cómo los arbotantes de la catedral conducen el peso de la techumbre hacia el suelo, no descubrimos una catedral, sino las teorías constructivas góticas, y analizando el retablo de la catedral de Astorga, somos capaces de ver los gestos, los movimientos, que encontramos en las obras del propio Miguel Angel”.
“El futuro de nuestra tierra se asienta sobre el pasado, sus tesoros artísticos, su patrimonio, su historia, su cultura, su gastronomía, e incluso los mitos, el tipismo y la huella literaria.
Presentó el acto el alcalde de Astorga, Juan José Alonso Perandones, quien destacó la oportunidad de la obra, que pone en valor la sinergia entre dos ciudades históricas, León y Astorga, cuyo interés turístico y cultural es cada vez más reconocido.
El director gerente de Everest, Miguel López Varela, destacó el interés de la obra y su modernidad, puesto que cuenta con un código QR, que permite el acceso a información complementaria, actualizada, a través del teléfono móvil.
Palacio Episcopal de Astorga, obra de Antonio Gaudí. Foto:Beatriz Álvarez Sánchez
El libro, de caracter didáctico, trata de fomentar el amor y el conocimiento del arte.
Portada del libro, que acaba de editar Everest.