Nadie duda que viajar es una de las experiencias más enriquecedoras que existen. No importa si se trata de un fin de semana en un pueblo cercano o de una aventura de varios días al otro lado del mundo: cada viaje nos deja recuerdos que muchas veces permanecerán en nuestra memoria, y servirán de aprendizaje vital.
Aunque la experiencia en sí es lo más valioso, muchas veces queremos llevarnos algo más. Un recuerdo que nos haga revivir esos momentos, o un regalo para compartir con alguien especial una parte de lo vivido. ¿Quieres tener algunas ideas más allá del típico imán para la nevera o la camiseta con el nombre de la ciudad? En este artículo queremos proponerte otras ideas menos clásicas que seguro que te encantarán, por ser más personales y menos genéricos.
Ideas de regalo y recuerdo que siempre triunfan
Ahora te vamos a dar nuestra selección de ideas de regalo que siempre nos hacen quedar bien, ya sea con otras personas, o con nuestro propio "yo" del futuro:
1. El álbum de fotos: revive tu viaje cada vez que lo abras
Las fotos que sacamos durante un viaje suelen quedar guardadas en el móvil o en la nube, sin mucho orden y casi siempre olvidadas. Cientos de fotos que quizás nunca llegues a depurar y revisar... si las has compartido por Whatsapp o redes sociales quedarán simplemente olvidadas en un torrente de mensajes. Eso no es lo mejor.
Así que nuestra primera sugerencia es el álbum de fotos: una forma de transformar esas imágenes en un recuerdo tangible y emotivo. A veces crear un álbum personalizado da un poco de trabajo, porque tienes que seleccionar fotos, juntarlas de manera creativa, pero el resultado siempre es un éxito, una forma ideal de darle valor a tus fotos y recodar todos aquellos detalles que no deseas que se olviden nunca.
Nosotros siempre que podemos lo usamos también para regalar a las personas con las que viajamos, en las navidades o su cumpleaños y sin duda es el mejor presente que puedes hacer. Siempre triunfa. En ese sentido el álbum de fotos de CEWE es perfecto, ya que puedes diseñarlo como quieras, elegir el tamaño, el estilo, las plantillas y los textos que acompañan cada página.
Imagina tener en tus manos un libro que cuente, paso a paso, tu aventura. Desde el primer desayuno en ese café escondido, hasta el atardecer en aquella playa que parecía irreal. Además, si el viaje fue en pareja, con amigos o familia, este álbum se convierte también en un regalo muy especial para ellos.
2. Un objeto típico hecho a mano por artesanos locales
Cada lugar tiene su identidad, y muchas veces se refleja en su artesanía. Puede ser una cerámica pintada a mano, un tejido típico, una joya hecha con materiales de la zona o incluso una figura tallada por un artista local.
Llevarte uno de estos objetos no solo es tener algo bonito: es apoyar la cultura local, preservar tradiciones y llevarte un pedazo real del lugar. Pero ojo, siempre que puedas, compra directamente a los artesanos, ya que te asegura que el objeto tendrá historia, alma y probablemente una conversación interesante detrás.
3. Un diario de viaje lleno de anotaciones y pequeños objetos
Si eres de los que disfrutan escribiendo, llevar un diario de viaje puede ser uno de los recuerdos más valiosos. No tiene que ser perfecto ni extenso, solo que refleje tu día y las cosas que más te impactaron.
Puedes anotar lo que hiciste cada día, frases que escuchaste, pensamientos, impresiones. También puedes pegar en él boletos de tren, servilletas con nombres de restaurantes, hojas, flores secas o pequeños tickets.
Con el tiempo, ese cuaderno se convierte en una cápsula del viaje. Algo único que no encontrarás en ninguna tienda de souvenirs. Además puedes conseguirlo por una inversión mínima, solo tendrás que esforzarte para anotar los momentos y las experiencias que quieras recordar. Este tipo de regalos, que nos cuestan nuestro esfuerzo son inversiones que valoraremos siempre en el futuro.
4. Un regalo gastronómico para compartir en casa
Otra cosa que no suele fallar es llevarse algo de la gastronomía local. La comida tiene el poder de transportarnos a lugares sin movernos del sitio. Traer ingredientes o productos típicos del lugar que visitaste es una forma excelente de alargar el viaje una vez de vuelta. Puede ser una botella de vino, una mezcla de especias, un dulce típico o una salsa local.
Si vas a regalarlo, añade una nota con una sugerencia de receta o un pequeño contexto del lugar de origen. Así no solo estás regalando comida, estás compartiendo una experiencia.
Consejos para recuerdos y regalos
Las anteriores son solo algunas pequeñas ideas, con las que siempre acertarás. Pero antes de acabar quiero repasar algunos consejos e ideas para recuerdos y regalos:
1.- Regala siempre que puedas experiencias o recuerdos que te ayuden a recordar con todos los detalles esas experiencias
2.- No te lleves cosas del lugar, como piedras, animales o plantas. Eso degrada el entorno donde estuviste y no es lo que realmente quieres que ocurra.
3.- Compra cosas que sean verdaderas, por ejemplo si es un recuerdo físico, que sea de artesanía y no producido en masa en fábricas de china!!
Al final, quédate con que "viajar es vivir", pero también recordar. Lo que te llevas de un viaje no tiene por qué ser caro ni voluminoso, pero sí debería tener significado. Porque los mejores recuerdos no se compran: se construyen, se eligen y, sobre todo, se conservan con intención de transportarnos de nuevo hacia esas experiencias vividas.
