Bogotá 25 de octubre de 2011
Los grandes logros que alcanzaron en astronomía, matemáticas, arquitectura, escritura y en otras artes, así como su complejo sistema de calendarios que les permitió medir el tiempo -que concebían cíclicamente- hicieron de los mayas una de las sociedades más importantes de la América Prehispánica.
El Museo del Oro presenta La sociedad y el tiempo Maya, una muestra de 96 objetos patrimoniales del Museo Regional Palacio Cantón de Mérida, México, que invitan a explorar una de las cosmovisiones más fascinantes de la historia, y a entender -lejos de la mala interpretación que se hace por estos días- el origen y el sentido de sus profecías.
Según el calendario maya, el 22 de diciembre de 2012 terminará la quinta era del universo, un ciclo de 5.125 años, e iniciará otra al igual que las cuatro veces anteriores.
“Para la civilización maya, el tiempo es una realidad cíclica: tiempo agrario, tiempo cósmico y el tiempo de las dinastías gobernantes, formaban parte de un círculo que cumplía rigurosas etapas, y en donde el final era sólo el comienzo de lo mismo”, explica Alfonso de María y Campos, Director General del Instituto Nacional de Antropología e Historia de México (INAH).
El tiempo maya se registraba simultáneamente con dos calendarios: uno sagrado de 260 días y otro civil de 365 días; ambos constituían la Rueda Calendárica, cuyo ciclo duraba 52 años.
Para calcular períodos más grandes existía además La Cuenta Larga, que se agrupaba en medidas de tiempo denominadas kin (un día), uinal, tun, katun y baktun (de 144.000 días). Trece baktunes constituían una era.
Los calendarios fueron hechos por sacerdotes mayas, quienes basados en sus complejos sistemas matemáticos y en un profundo conocimiento de los astros, podían predecir eventos celestes como solsticios y equinoccios, eclipses y otros hechos astronómicos.
Hacían además profecías y augurios sobre el destino de las personas y las sociedades, sobre desastres naturales o eventos míticos del futuro relacionados con el linaje de sus gobernantes. Para hacer sus profecías, los sacerdotes miraban al pasado, escritos en estelas y códices, dado que por la forma cíclica de contar el tiempo pensaban que los hechos se solían repetir de un ciclo a otro.
La muestra, que estará acompañada por conferencias y talleres, hace parte del programa de exposiciones internacionales del Museo del Oro que en años anteriores ha traído a Bogotá exposiciones patrimoniales de China y Chile.
En la actualidad existen más de cuatro millones de mayas, divididos en nueve grupos étnicos y con cerca de 30 lenguas propias. Son considerados la sociedad indígena más numerosa de toda América.
Incensario en forma del dios Kin, el sol. La palabra kin significa día, tiempo y sol. Kin es el creador de la vida.