Madrid, mayo 2011
La exposición, que podrá visitarse en el Reina Sofía desde el 11 de mayo y hasta el 12 de septiembre de 2011, supone la primera oportunidad que tiene el público español de introducirse en una muestra a gran escala de la artista Yayoi Kusama (Matsumoto, Prefectura de Nagano 1929), considerada la artista viva más reconocida de Japón.
Las casi seis décadas de trayectoria de la artista, iniciada en exposiciones individuales con tan solo 23 años en Japón, le llevan a cruzar las fronteras nacionales hasta Nueva York en 1958, ciudad ya reconocida como epicentro artístico mundial.
Durante su estancia en Nueva York, su obra se situá en un territorio cuya excepcionalidad es única, alejándose de las referencias más habituales, y llegando a convertir a la artista en una de las representantes más habituales de un arte pop y feminista.
Ya de vuelta en Japón (1973), Yayoi encarna el trauma del sujeto globalizado, cuya pérdida de raíces le conduce a episódicas crisis psiquiátricas. A este proceso le acompaña la escritura de su novela Manhattan Suicide Addict (1978). Ya en los ochenta y noventa retoma la producción pictórica y escultórica. En la actualidad, Yayoi Kusama continúa trabajando en su estudio de Tokio.
Esta muestra, organizada en colaboración con la Tate Modern de Londres, refleja la profundidad de la trayectoria de Kusama, así como su contemporaneidad, y recorre su fructífera carrera, acercándose a su pensamiento y a los diferentes materiales y técnicas que utiliza para llevar a cabo sus obras.
Self-Obliteration (Auto-obliteración), 1967. Yayoi Kusama