Borja, 23 de agosto de 2012
Para un lector normal, la primera duda que se plantea es la de si se trata de una noticia real. Para un amante del arte le parecerá surrealista.
Algunas fuentes han declarado que la "restauradora" ya había hecho gala de sus capacidades desde tiempos pasados y con el conocimiento del párroco de la iglesia del Santuario de Misericordia. algo que ahora ha sido nota tragicómica en redes sociales e incluso en algunos rotativos importantes de Occidente.
El trabajo "arreglado" se atribuía a un artista valenciano, Elías García Martínez, que fue profesor en la Escuela de Arte de Zaragoza, y tenía aproximadamente 120 años de antigüedad. El autor lo había pintado en muy poco tiempo, durante una de sus estancias en esta localidad.
Según el concejal de cultura local, Juan María Ojeda, Cecilia Giménez decidió, con toda su buena intención, restaurar el fresco que, según ella, se encontraba en mal estado por culpa del salitre.
La autora entró en la iglesia y empezó a retocar la obra. El problema es que en esta ocasión se le fue de las manos la restauración, con lo cual el fresco quedó completamente destrozado y oculto por una nueva pintura, nada realista.
Un equipo de restauradores está preparando un informe sobre la restauración de la pintura, e intentará salvar el verdadero "Ecce homo" de la mano de la restauradora de quien dicen en el lugar que "siempre tuvo pasión por el arte". Y es que no se sabe si intentó restaurar la pintura anterior o quiso hacer un término medio con los cristos de Georges Rouault...
Antes y después de la "restauración" del Ecce Homo llevada a cabo por la anciana.