París, 25 de agosto de 2012
El Comité del Patrimonio Mundial de la UNESCO a sugerencia de la Directora General, Irina Bokova, y decidió crear un fondo especial para apoyar los esfuerzos de salvaguardia de los sitios del patrimonio mundial de Mali, en particular Tombuctú y la Tumba de los Askia en Gao, afectados por el conflicto armado del norte del país.
Los fondos recaudados se utilizarán para ayudar al gobierno del país a evaluar los daños sufridos por ambos sitios y llevar a cabo trabajos de reconstrucción y rehabilitación tan pronto como lo permita la seguridad en la zona. También se usarán para reforzar las capacidades de los gestores de los sitios y de las comunidades locales de en Tombuctú y Gao.
?La etiqueta patrimonio mundial se otorga a los sitios de valor universal excepcional, de importancia para la humanidad en su conjunto. Por eso pido a la comunidad de Estados Miembros de la UNESCO, a las organizaciones regionales de África, a otros organismos internacionales y a ciudadanos de todo el mundo que aporten contribuciones a esta cuenta?, dijo Irina Bokova.
Los sitios del patrimonio mundial del norte de Mali han sido objeto de ataques destructivos desde que fueron ocupados por grupos rebeldes armados, en abril. En Tombuctú han sido profanados nueve mausoleos, dos de ellos situados en la mezquita de Djingareyber, la más importante de la ciudad.
Conflicto sirio
La UNESCO también ha expresado en los últimos días su preocupación por la situación en Siria, y en especial en Alepo, ciudad Patrimonio Mundial.
Estratégicamente situada en la encrucijada de varias rutas comerciales históricas que unían Oriente a Occidente, Alepo ha conservado un patrimonio monumental muy importante, reflejo de las sucesivas dominaciones de hititas, asirios, griegos, romanos, omayas, ayubís, mongoles, mamelucos y otomanos. La ciudad vieja de Alepo está inscrita en la Lista del Patrimonio Mundial desde 1986.
Mezquita en Tombuctú, Malí. UNESCO. T. Joffroy / CRATerre-EAG
La ciudad vieja de Alepo (Siria) está en la lista del Patrimonio Mundial. Winnie Denker © UNESCO