Tras su paso en 2008 por los Jardines del Palais Royal de París, y recientemente por Sevilla, Málaga y Madrid, el IVAM expone la obra de Xavier Mascaró caracterizada por trabajar en plancha de hierro y afrontar grandes volúmenes, evocando un deseo de dramatización de la existencia. Un trabajo perfectamente ejecutado, pero aparentemente inacabado, donde el paso del tiempo modifica su aspecto a través del óxido.
La muestra, que podrá visitarse hasta el próximo 31 de octubre de 2010, está formada por una instalación escultórica de grandes dimensiones, un conjunto de dibujos y una selección de esculturas que conviven en dos montajes diferenciados, creando un sugerente diálogo entre el interior y el exterior del museo.
Mascaró trae al IVAM a sus ‘guardianes’, figuras sentadas e iguales en su molde, pero con texturas y oxidaciones diferentes. También se podrán ver sus características ‘barcas’ y, recibiendo a los espectadores en el vestíbulo del museo, se instala uno de sus ‘músicos’, una escultura a gran escala que sorprende por su ligereza.
Instalación Barcas, Xavier Mascaró
Dibujo, Xavier Mascaró