Bilbao, 10 de marzo de 2014
Organizada con motivo de su 80 cumpleaños, Yoko Ono. Half-A-Wind Show recorre toda la carrera de Ono hasta la actualidad, con una visión global de de la múltiple producción de esta pionera del Arte Conceptual y la Performance.
La muestra reúne casi 200 piezas, entre instalaciones, objetos, películas, dibujos, fotografías, obras de texto y de audio, así como documentación de sus performances, para una visión completa de la múltiple producción de Yoko Ono (Tokio, 1933), desde algunas de sus obras más significativas de la década de 1960 hasta instalaciones recientes y obras ideadas con motivo de esta retrospectiva.
Durante más de sesenta años de producción, Yoko Ono (Tokio, 1933) ha sido reconocida como una de las más destacadas artistas de vanguardia. Pionera en aquellas especialidades artísticas a las que ha consagrado su vida, la artista ha sido considerada una de las precursoras del Arte Conceptual, el cine y la performance, así como una figura clave en el mundo de la música, con la producción de numerosos álbumes.
El visitante podrá descubrir en esta muestra el variado abanico de medios que ha utilizado a lo largo de su trayectoria: desde las artes plásticas, el dibujo, la poesía, el cine o la música hasta las instalaciones, el vídeo o la performance, entre otros.
Ciertos elementos de la tradición oriental enriquecen las obras de Yoko Ono, cuyo trabajo se basa en ideas, algunas de las cuales se manifiestan en forma de objetos, mientras que otras permanecen en el plano de lo inmaterial. A menudo, es posible reconocer en ellas una dimensión poética, un sutil sentido del humor y una actitud de crítica social, girando en torno a conceptos como la unidad, la confianza o el equilibrio.
Sus piezas adoptan formas y soportes heterogéneos para desafiar las ideas convencionales del arte y plantear cuestiones universales sobre la existencia humana: el poder de la imaginación, el compromiso político, los conflictos mundiales o el papel de la mujer en la sociedad son algunas de las ideas que le han llevado a ocupar un puesto destacado al frente de movimientos como el pacifismo o el feminismo.
El punto de partida para muchos de los trabajos de Yoko Ono son sus Instrucciones, directrices verbales o escritas que la artista dirige al público para la ejecución de acciones utópicas o realizables. De este modo, la autora asigna al espectador un papel activo en el proceso, incitándole a participar y conduciéndole a profundizar en la autorreflexión y el potencial de la mente. La palabra “Participa” colocada junto a algunas de las obras, es una invitación directa a interactuar con la obra.
Primeras instalaciones, películas y objetos
Nacida en Tokio en 1933, Yoko Ono pasó su infancia entre Japón y Estados Unidos. En año 1952 se trasladó con toda su familia a EE. UU. para asistir al Sarah Lawrence College, a las afueras de Nueva York. Tras estudiar composición y poesía contemporánea e involucrarse en la vanguardista ciudad de Nueva York, es a finales de la década de los cincuenta cuando la artista comienza a alcanzar la fama por sus innovadoras obras experimentales de arte conceptual y performance.
La primera parte de la exposición incluye documentación fotográfica y fílmica de las primeras performances y textos, incluyendo obras de arte físicas de la artista.
Sus Instrucciones para hacer pinturas (Instructions for Paintings), escritas en 1961 y 1962, su célebre performance Pieza corte (Cut Piece), de 1964, y la publicación este mismo año del libro Pomelo, una colección de instrucciones, aún hoy vigentes, que son tanto una pieza poética como un manual para impulsar la producción de una obra de arte, contribuyeron a la consolidación definitiva de Yoko Ono dentro de la vanguardia japonesa y estadounidense.
El 16 de julio de 1961 la artista inauguraba su exposición Paintings & Drawings by Yoko Ono en la AG Gallery de Nueva York. Las obras que se exhibían no guardaban ningún parecido con pinturas convencionales, excepto por el formato. Se trataba de trozos de lienzo sin tensar, pintados con tinta japonesa y dispuestos en el suelo, como Pintura para pisar (Painting to Be Stepped On). En ocasiones, la artista ofrecía directrices verbales sobre el modo en que los visitantes podían enfrentarse a las “pinturas” con acciones reales como gotear agua en el caso de Pintura gota de agua (Waterdrop Painting)– o usar la imaginación en Painting for the Wind (Pintura para el viento). El Museo acoge las fotografías originales, tomadas por George Maciunas.
En esta misma sala se incluye Pintura de techo (Ceiling Painting), una obra presentada en la muestra de Ono celebrada en 1966 en la Indica Gallery de Londres. En ella, la artista invita al observador a trepar mentalmente a una escalera blanca situada en la sala, donde una lupa, sujeta con una cadena, cuelga de un marco colocado en el techo. Una vez allí, al utilizar la lente de aumento el observador descubre la “instrucción”: “YES” (“SÍ”). Fue a través de esta pieza como Yoko Ono conoció a John Lennon, quien conmovido por la positividad que transmitía, solicitó que le presentaran a la artista.
También se encuentran en este recorrido las obras Media Habitación (Half-A-Room, 1967) y Dispensadores de aire (Air Dispensers, 1971). La primera de ellas representa una estancia donde todos los objetos, desde una maleta hasta unos zapatos, se han reducido a la mitad y pintado de blanco. El tema de fondo es la bisección tanto física como psíquica, que Ono considera una condición de la existencia humana. Por su parte, Dispensadores de aire consiste en un dispensador de caramelos, aunque, en este caso, relleno de cápsulas aparentemente vacías. Sin embargo, estos recipientes de plástico están llenos de algo muy preciado: el aire, que para la artista es "la única cosa que compartimos".
Performances fundamentales
La muestra continúa con una sección dedicada específicamente a una disciplina en la que la artista es pionera y ocupa un lugar destacado: la performance. De hecho, es considerada una de las personalidades más relevantes de lo que se ha considerado la “edad de oro” del arte de la performance.
En esta sala se encuentra representada, por medio de diversos documentos, su performance más conocida: Pieza corte (Cut Piece, 1964). Estrenada en 1964 en Kioto y considerada un hito en la historia del arte de la performance, en ella la artista invitaba a la audiencia a subir a un escenario donde se encontraba arrodillada o sentada. Una vez allí les invitaba a cortar trozos de su vestido con unas tijeras.
Una de las acciones impactantes llevadas a cabo por la artista fue Evento de envolver el león (Lion Wrapping Event, 1967), consistente en envolver uno de los cuatro grandes leones que presiden la Plaza de Trafalgar Square de Londres. Su primer intento, en el que utilizó papel, fue interrumpido por la policía. Un segundo intento, esta vez usando tela, resultó exitoso. Esta acción de Yoko Ono fue considerada como una reivindicación política al intentar borrar uno de los símbolos típico del Imperio Británico.
Cine experimental
Las películas de Ono también desempeñan un papel relevante en la historia del arte más reciente. Tras sus primeras experiencias artísticas con la música y la performance, algunas de las cuales se desarrollaron en el marco del movimiento Fluxus, la artista comenzó a realizar guiones y películas conceptuales en el año 1964. Hasta 1972 produjo un total de 19 filmes, algunos de ellos en colaboración con John Lennon.
En sus propuestas de cine underground la artista revela su preocupación por aquellos temas presentes a lo largo de su obra como el cuerpo, los derechos de las mujeres o su búsqueda personal de la libertad interior.
Una de las salas del Museo acoge al completo trabajos como Violación (Rape), de 1969, un film rodado en Londres en colaboración con John Lennon, en el que un cámara y un técnico de sonido persiguen durante dos días a una joven elegida al azar en la calle y la acosan filmándola de forma constante sin pedirle permiso, provocando en ella reacciones desesperadas.
También se muestra la famosa película Mosca (Fly), de 1970, que muestra un primer plano de una mosca paseándose sobre el cuerpo desnudo e inmóvil de una mujer y en la que el observador tiene ocasión de descubrir extraños y singulares “paisajes corporales” desde la perspectiva de un insecto.
Película n.o 1 (Pieza cerilla) [Film No. 1 (Match Piece)] de 1966 muestra el sencillo proceso de una cerilla ardiendo y consumiéndose en primer plano y a cámara muy lenta. Un fenómeno sencillo que irradia algo meditativo y se podría interpretar en sentido metafórico: la breve existencia humana, que se enciende, luce brevemente y desaparece de nuevo.
Instalaciones y obras recientes
El recorrido continúa por una serie de instalaciones de gran formato realizadas en las últimas décadas, así como una serie de trabajos de producción entre los que se encuentra Evento agua (Water Event, 1971/2013). Esta pieza, realizada para la primera retrospectiva de Yoko Ono en el Everson Museum of Art de Syracuse en 1971, es un trabajo para el que la artista solicitó la contribución de sus amigos. Cerca de 120 personas colaboraron, entre ellas los artistas Andy Warhol, Jasper Johns y Willem de Kooning, el compositor John Cage, músicos como el propio John Lennon o Bob Dylan o el actor Jack Nicholson.
También se podrá contemplar la instalación Teléfono en laberinto (Telephone in Maze) (1971/2011/2013) consistente en un laberinto de plexiglás cuyos caminos conducen a un cubículo. Este espacio central está construido con un espejo de sentido único que permite a los que están dentro ver el exterior pero, al mismo tiempo, permanecer parcialmente oculto para los que están fuera. Esta cabina alberga un teléfono al que periódicamente llama la propia Yoko Ono para conversar con una persona del público. Esta obra juega con la percepción y la orientación física del visitante con el fin de provocar una experiencia inesperada.
En esta misma sala se encuentra la impactante Pieza de equilibrio (Balance Piece, 1997/2010), una instalación que reproduce una habitación en la que se ha colocado un potente imán eléctrico en la pared lateral izquierda. De esta forma todos los elementos que se encuentran en ella se desplazan bruscamente a la izquierda. En este trabajo la artista explora ideas clave del budismo zen como la búsqueda del “equilibrio mental”, el intento de lograr un punto medio entre opuestos o la autoconciencia.
Completa la sala la serie de 21 fotografías con 21 piezas de texto Memoria vertical (Vertical Memory, 1997) que nos conducen a lo largo de un viaje vital desde el nacimiento hasta la muerte.
Arquitectura y representación de la naturaleza
Otra de las salas en forma de pétalo del Museo acoge dos instalaciones que ocupan el espacio de forma sumamente dramática, que fueron concebidas como obras independientes aunque en varias ocasiones se han exhibido juntas debido a su carácter complementario: Rayos de la mañana (Morning Beams, 1996/2014) y Lecho de río (Riverbed, 1996/2014). En Rayos de la mañana un centenar de cuerdas blancas de nylon que evocan rayos de luz, emanan desde el techo de la galería hasta el suelo, donde se fijan ancladas por nudos marineros.
La anterior pieza convive en el mismo espacio con una obra de naturaleza muy diferente: Evento de la habitación azul (Blue Room Event), de 1966, una creación basada en la idea de utilizar palabras, escritas por la propia artista en las paredes de la sala, con el objetivo de subvertir la percepción habitual del espacio. Como parte de estas instrucciones se puede leer: “Stay until the room is blue./This window is 2000 ft. wide./This room is bright blue./This room slowly evaporates every day. /This room glows in the dark while we are asleep.”
El recorrido por las instalaciones de Yoko Ono finaliza con Moviendo montañas en una nueva versión creada expresamente para esta exposición. En esta obra se invita al público, de forma individual o en colaboración con otras personas, a meterse en las bolsas presentes en la sala para formar esculturas móviles, todo ello al ritmo de la canción de Yoko Ono Moving Mountains, perteneciente al álbum Between My Head And The Sky.
La exposición finaliza con un espacio dedicado por entero a la producción musical de la artista. Vídeos, grabaciones de conciertos, portadas de sus CDs y LPs, pósters de conciertos y estaciones sonoras donde poder escuchar su música, incluyendo las colaboraciones de Yoko Ono, entre otros, con su hijo Sean. En el año 1970 se publica Yoko Ono/Plastic Ono Band, que marca un hito en su ininterrumpida trayectoria musical.
Yoko Ono. Half-A-Wind Show. Retrospectiva
14 de marzo, 2014 – 1 de septiembre, 2014
Museo Guggenheim Bilbao
Avenida Abandoibarra, 2. Bilbao
Yoko Ono Walking On Thin Ice, vídeo, 1981 Fotograma de vídeo © Yoko Ono
Pintura de techo, pintura del sí (Ceiling Painting, Yes Painting), 1966. Yoko Ono
Fotograma de Mosca (Fly), 1970. Yoko Ono.
Yoko Ono y John Lennon ¡La guerra ha terminado! (War Is Over!), 1969 Valla publicitaria instalada en Times Square, Nueva York. Yoko Ono.
Pieza corte (Cut Piece), 1965 Performance interpretada por Yoko Ono. Carnegie Recital Hall, Nueva York, 21 de marzo, 1965. Foto de Minoru Niizuma.
Rayos de la mañana / Lecho de río (Morning Beams / Riverbed), 1996 Vista de las obras instaldas en el Israel Museum, 2000. Yoko Ono.
Yoko Ono y John Lennon durante la performance en cama por la paz (Bed-In for Peace) Hotel Hilton, Ámsterdam, 25–31 de marzo, 1969. Yoko Ono
Vuela (Fly), 1996. Yoko Ono
Pintura para añadir color (Add Color Painting), 1960/1966 Pintura, periódico y papel de aluminio sobre lienzo. Yoko Ono.