Ésta ha sido la primera vez que se presentaban de forma conjunta las tres actuaciones, a las que, una vez concluidas, el gobierno español habrá destinado 147 millones de euros, la inversión pública más importante en la historia de las tres instituciones, que crecerán en más de 52.000 metros cuadrados.
Con esta iniciativa se pretende hacer de Madrid una de las ciudades con mejor oferta cultural y museística de todo el mundo, aprovechando la proximidad de sus museos -estos tres distan diez minutos andando-, a la manera en que lo han hecho otras importantes ciudades, como Berlín, con su Isla de los Museos, Londres con su Barrio de los Museos, y Washington con sus Museos del Mall.
El conjunto conformado por el Prado, el Reina Sofía y el Thyssen Bornemisza se despliega a lo largo de los paseos del Prado y Recoletos, un ámbito urbano también en fase de remodelación a cargo de un equipo de arquitectos encabezado por Álvaro Siza, y donde hay otra importante oferta cultural adicional.
EL THYSSEN
El Museo Thyssen-Bornemisza permite recorrer más de siete siglos de la historia del arte y contemplar obras maestras de la pintura. Es una excelente oferta de arte, complementaria de las del Prado o del Reina Sofía, en temas como los maestros del impresionismo o la pintura norteamericana.
La ampliación del Thyssen fue explicada a la prensa en un acto en el que estuvo la baronesa Thyssen y el conservador jefe del centro, Tomás Llorens. En esta reunión se mostró el estado de los trabajos, resultado de anexionar al Palacio de Villahermosa(sede actual), mediante un nuevo pabellón acristalado parcialmente hundido en el terreno y cubierto por un jardín, dos edificios contiguos entre sí, para dotar al museo de 16 nuevas salas que deben albergar la colección de Carmen Cervera.
EL REINA SOFÍA
En 1992 fue inaugurado el Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía con una colección permanente de arte contemporáneo. Sus fondos se han enriquecido constantemente con obras notables, entre ellas el famoso "Guernica" de pablo Picasso. Es una referencia obligada en el arte moderno español. También ahora se amplía.
El arquitecto Alberto Medem ilustró lo referente al crecimiento del Reina Sofía, sobre un solar contiguo de forma triangular y compuesto de tres edificios con funciones independientes: exposiciones temporales, biblioteca y auditorio, agrupados en torno a un enorme atrio central, que queda cubierto por una poderosa celosía que vuela sobre la calle.
EL PRADO
La aspiración de hacer un gran museo para exponer los tesoros artísticos de la monarquía española se cumplió con Fernando VII, quien escuchó las peticiones de la Real Academia de Bellas Artes y al especial interés que puso en el proyecto su segunda esposa María Isabel de Braganza, a la que el Museo ha querido considerar siempre como su fundadora. Su escultura sedente, obra neoclásica de Álvarez Cubero, parece estar recibiendo a los visitantes en el vestíbulo de la Puerta de Velázquez de la entrada oeste del Museo. Lamentablemente la reina murió sin poder ver la inauguración del que se llamó Museo Real de Pintura y Escultura, y que tuvo lugar el 19 de Noviembre de 1819.
El museo es probablemente la pinacoteca más valiosa del mundo, con tesoros excepcionales de grandes maestros como Tiziano, Rubens, Goya, Velázquez, y una multitud de autores de numerosos países. La colección de pintura, con su enorme riqueza, ha oscurecido la importancia de las otras colecciones. Por limitación de espacio, el Prado sólo puede exhibir una séptima parte de su contenido.
El Prado, que acaba de cumplir 184 años, experimenta con ésta la mayor ampliación de su historia, a cargo, en su parte principal, de Rafael Moneo, Premio Pritzker. Moneo explicó cómo ha llevado a cabo la unión del antiguo edificio de Juan de Villanueva con el complejo formado por una construcción de nueva planta y por el claustro restaurado del desaparecido monasterio de Los Jerónimos, cuidadosamente despiezado y reconstruido de nuevo.
A ellos se ha añadido recientemente la Casa Encendida, edificio cultural de la Caja de Madrid y, pronto lo hará CaixaForum, centro cultural de la otra gran caja de ahorros española: La Caixa, que aprovechara un viejo inmueble industrial para hacer un centro cultural de tonos de hierro oxidado, proyecto arquitectónico del estudio de Jacques Herzog y Pierre de Meuron, ganadores también del premio Pritzker de arquitectura.
No lejos de este conjunto excepcional se hallan otros centros museísticos, entre los cuales cabe citar el Arqueológico, donde destacan las magníficas colecciones pertenecientes a la Prehistoria, Protohistoria, Antigüedades egipcias y del Próximo Oriente, Grecia y Roma, en un magnífico palacio neoclásico, en el que también se ubica la Biblioteca Nacional.
Uno de los excelentes cuadros del Prado, el lavatorio de Tintoretto
El gran paseo del Arte incluye los tesosor del museo Arqueológico, un centro de gran interés.