Ya en el mismo tránsito del 1999 al 2000, la Plaza de la Quintana de Santiago acogió a unas 3.000 personas para recibir el 2000 en el primer espectáculo organizado por el Ayuntamiento de la ciudad como Capital Cultural. Todos disfrutaron de un espectáculo de música y fuego, diseñado por el artista Pere Piñol, titulado la Quema del siglo.
El acto se inició cuando la Berenguela, la principal campana de la Catedral, marcó cadenciosamente las doce campanadas, y los asistentes degustaron las uvas del fin de año.
Después de la hoguera y los fuegos de artificio, animaron la noche compostelana tres conciertos: en la plaza del Obradoiro la cantante Luz Casal ofreció un recital; en la del Toural tocó la gaiteira Susana Seivane, y en la Plaza Roja, ya fuera del casco viejo, actuaron dos grupos, Son Latino y Sonora Latina.
Santiago de Compostela centra sus iniciativas de éste año en torno a la música, la danza, el cine, el teatro, el pensamiento y el arte, además de actividades evocadoras de su tradición jacobea.
El alcalde de Santiago, Xosé Antonio Sánchez Bugallo, presentó a inicios del años 1000 actos culturales, para todas las sensibilidades, y en los que se invertirán unos 4.000 millones de pesetas (unos 24 millones de dólares), la mitad de ellos de fondos privados. Son –dijo- mil nuevas razones para visitar Santiago.
La programación musical es notable, con cien espectáculos, en los que se combina la música clásica y los conciertos de pop, rock y cantautores. En este capítulo sobresale el Festival Santi-Rock, que contará con la participación de más de 25 grupos durante cuatro días seguidos con nombres en la línea de The Coors, The Cardigans, Red Hot Chilli Peepers, Dover o The Machine.
En el apartado de cine, se celebrará una edición extraordinaria de Cineuropa y se creará el Premio Compostela para la carrera de un autor relevante en la cinematografía europea. El teatro presenta una extensa programación de grupos españoles con nombres destacados como Els Joglars o Els Comediants.
La acogida de esta capitalidad cultural ha sido buena. En medios turísticos se comenta desde los primeros meses del 2000 que la afluencia de visitantes por el Camino de Santiago es como la de un Año Santo.
Los apoyos mediáticos a esta iniciativa cultural son amplios. Así, las televisiones públicas europeas, entre ellas TVE, han elaborado una serie de documentales que reflejan las imágenes, la historia y la cultura de siete de las nueve ciudades que han sido declaradas capital europea del 2000. La serie dedica capítulos a Santiago: Aviñón, Cracovia, Bergen, Bolonia, Bruselas y Helsinki.
Santiago ha encontrado un hueco entre las grandes ciudades del mundo, con atractivos suficientes para ser visitada por quienes buscan emoción e interés artístico y cultural.
Por Alfonso Ribeira
Animado grupo de jóvenes, ante el hostal de los Reyes Católicos. Foto guiarte