Gland, Suiza, 3 de abril de 2014
La Corte sostiene que los permisos especiales concedidos por el Japón en relación a la caza de ballenas en el Océano Austral no son realmente para la investigación científica.
La sentencia emitida favorece la petición de Australia, que cuestionó lo que Japón llama "caza científica". El fallo de la Corte fue unánime. El máximo tribunal de la ONU emitió la sentencia el 31 de marzo. La decisión del tribunal es vinculante y no puede ser apelada.
"La decisión del tribunal permitirá finalmente que se cumpla el propósito del Santuario del Océano Austral", eplicó Aimée Leslie, del grupo de Cetáceos y Tortugas Marinas de WWF Internacional. "La protección de las ballenas en el Océano Austral es esencial para el mantenimiento de las poblaciones de ballenas sanas de todo el mundo", agregó.
El gobierno australiano había iniciado procedimientos legales contra Japón en 2010, alegando que la "caza científica" de Japón es una violación de las obligaciones de los tratados del país en virtud de la Convención Internacional para la Regulación de la Caza de la Ballena, así como otras obligaciones internacionales para la conservación de los mamíferos marinos y el medio marino.
La caza comercial de ballenas fue prohibida en todo el mundo en 1986. El Océano Austral que rodea la Antártida fue declarado santuario de ballenas ocho años después. A pesar de estas protecciones, Japón ha cazado más de 10.000 ballenas en el Océano Austral desde que la moratoria se puso en marcha.
Humpback whales. WWF-Canon / Cat HOLLOWAY
Jueces del Tribunal Inernacional de Justicia declarando el final de la caza de ballenas en el Océano Austral. Photo Courtesy of the ICJ.