Guía de Santiago de Chile
Qué Ver en Santiago de Chile
La Catedral de Santiago de Chile, la Plaza de Armas, el Palacio de la Moneda, el Parque Metropolitano, el Congreso Nacional, la Real Audiencia... la ciudad tiene muchos lugares interesantes que conocer.
Iglesia de San Francisco
Plaza de Armas
Correo Central
Palacio de la Real Audiencia
Palacio de la Moneda
Congreso Nacional
Museos e instituciones de cultura
Parque Metropolitano
Información general de Santiago de Chile
Poblada por más de cinco millones de habitantes, Santiago de Chile es la capital de la República de Chile.
Santiago de Chile es la capital de la República de Chile, urbe fundada hace casi cinco siglos, una de las más destacadas de América del Sur. Guía de Santiago de Chile realizada para guiarte.com por Tomás Alvarez y Violeta Medina, con Fotografías de Beatriz Alvarez Sánchez.
Información general de Santiago de Chile
Poblada por más de cinco millones de habitantes, Santiago de Chile es la capital de la República de Chile.
La ciudad
Poblada por más de cinco millones de habitantes, Santiago de Chile es la capital chilena.
la ciudad, que fue fundada hace casi cinco siglos, es una de las más destacadas de América del Sur, y en ella se encuentran las sedes de las principales instituciones chilenas, excepto el Congreso Nacional, que se halla en Valparaíso.
Se sitúa en un valle, entre las montañas andinas y la costa del Pacífico; territorio regado por el río Mapocho, que causó incontables quebraderos de cabeza a los habitantes de la ciudad, cuando ésta era la capital de la Nueva Extremadura.
En la actualidad, sus pobladores residen en 37 comunas, sobre una superficie de 640 kilómetros cuadrados, rebasando lo que se considera como Provincia de Santiago, y adecuándose en su desarrollo a las comunicaciones y la orografía, lo que genera un plano en forma de hoja de parra.
La ciudad, de alta calidad de vida, está excelentemente comunicada por vía aérea tanto con los principales aeropuertos de América como con Europa, especialmente con España, merced a las conexiones de Iberia
Nave central de la catedral de Santiago de Chile. Imagen de Beatriz Alvarez Sánchez. Guiarte.com Copyright
Historia
Pedro de Valdivia fue el conquistador español que fundó la urbe de Santiago de Chile el 12 de febrero de 1541.
En el lugar habitaban distintos grupos tribales bajo el control inca, que cultivaban la patata o el maíz, productos desconocidos en aquel tiempo en Europa.
En la falda del cerro Huelén, rebautizado como Santa Lucía, junto a la corriente del Mapocho, se ubicó el primer poblado creado por los conquistadores, población a la que se bautizaría con el nombre del apóstol Santiago. Pedro de Gamboa sería el arquitecto que diseñó el trazado en damero, propio de las urbes coloniales, que tenía su centro vital en la llamada Plaza de Armas.
Los inicios de la urbe fueron heróicos. Mientras Valdivia avanzaba hacia el sur, Santiago logró resistir a un poderoso ataque indígena. Los 55 españoles de la guarnición fueron conducidos por Inés de Suárez, compañera de Valdivia y primera europea llegada a la población.
La ciudad se fue recuperando de aquel asedio, aunque en competencia con Concepción, donde se ubicó temporalmente la Real Audiencia.
En el siglo XVII continuó creciendo, pese a los desbordamientos del Mapocho y a los terremotos. El XVIII consolidó el desarrollo, con obras como el puente de Calicanto, la catedral o el palacio de La Moneda.
Tras la independencia de Chile, prosiguió la pujanza urbana, pese a nuevos terremotos, de modo que hacia 1860 Santiago alcanzó los 100.000 habitantes.
El ferrocarril y negocios como el del cobre, potenciaron su papel económico. La industria y la banca se centraron en la capital, en detrimento del otro gran polo de desarrollo, Valparaíso. De este modo, en 1920 se alcanzó un censo de 500.000 habitantes.
Este desarrollo obligó a crear nuevos barrios periféricos, algunos de excelente arquitectura, de modo que en la actualidad se perciben a lo largo de diversas barriadas bellos edificios de aquel tiempo, aunque lamentablemente faltos de conservación, lo que contrasta con el auge de una nueva construcción de rascacielos que cambian el perfil del paisaje urbano.
Este crecimiento urbano registrado en los últimos años ha hecho que la ciudad aglutine ya a cerca del 40 por ciento de los pobladores de la República, lo que sin duda es un elemento de empeoramiento de la calidad de vida y la justicia social.
Estatua de Valdivia en el casco viejo de la ciudad de Santiago de Chile. Imagen de Beatriz Alvarez Sánchez. Guiarte.com Copyright
Palacio Arzobispal y catedral de Santiago, en Plaza de Armas. Imagen de Beatriz Alvarez Sánchez. Guiarte.com Copyright
Ocio y gastronomía
Ocio y gastronomía en la ciudad de Santiago de Chile.
La gastronomía chilena es variada y rica en sus productos naturales, aunque poco conocida a nivel internacional salvo sus grandes vinos.
Lo más típico para degustar los mariscos y pescados chilenos es el Mercado Central donde además de los puestos típicos de venta a público hay una gran variedad de restaurantes en el que destaca “Donde Augusto”, pero cuyos precios son elevados comparados con muchos de los pequeñas “picadas” (así le llaman a lugares típicos y baratos) que están dentro también del mercado, pero en los laterales del patio central.
Elementos negativos: el agobio al viajero, a quien no dejan en paz hasta que le sientan en el restaurante, y la presión obsesiva por la propina, algo que acaba resultando sumamente desagradable.
Lo mejor es pedir el famoso “Caldillo de Congrio” tan conocido por el poema de Pablo Neruda:
“En el mar
tormentoso
de Chile
vive el rosado congrio,
gigante anguila
de nevada carne.
Y en las ollas
chilenas,
en la costa,
nació el caldillo
grávido y suculento,
provechoso”...
Otro plato muy cotizado por los chilenos sobre todo al día siguiente de noche vieja es una mariscada o una sopa de mariscos. Eso repone “la caña”, el cuerpo, resucita “a muertos” se suele decir allá.
Dentro de los mariscos y como plato para compartir se recomienda probar las “machas” (una especie de mejillones gigantes) a la parmesana (con queso derretido encima). Eso acompañado siempre del muy apetitoso y casero pan amasao, el cual siempre caliente gustan de echar mantequilla o piures (tomate, cebolla y cilantro picado en pequeños trozitos). Otras variedades son la paila marina (gana mucho el sabor por la vasija de barro), los picorocos, los erizos crudos, los locos (variedad de molusco altamente cotizado en Japón), los chupes de jaibas, centollas, pescados, etc. (mezcla tipo mousse).
Todo acompañado de buenos vinos blancos que abundan y cuya relación calidad-precio es muy buena. Lo que no se puede dejar de probar es el vino tinto variedad Carmènére, cepa única en el mundo ya que sobrevivió en Chile a la peste que la exterminó en Francia y en toda la Europa del siglo XIX. Y obviamente de aperitivo el pisco sour chileno elaborado en el país y con variaciones en su elaboración como coctáil con respecto a Perú, país originario de este fuerte destilado de uva que fluctúa entre los 35º y los 50º de alcohol que por su mezcla con azúcar y limón resulta muy engañador.
Además del Mercado Central los dos barrios donde hay diversidad de buena comida chilena son el Barrio Lastarria y el Barrio Bellavista en ambos también se concentran los sitios de compra que merecen la pena, tanto en ropa como artesanías. Actualmente, el Barrio Lastarria, en pleno centro de Santiago por la parte detrás del inicio de la Alameda y colindante con el bello Parque Forestal, se ha posicionado como el primer y único barrio gay de Chile.
Está lleno de cafeterías (por ejemplo los de la calle Mosqueto) con encanto que ofrecen variedades de dulces típicos, mucho de la influencia alemana que tiene este país, en espacios con libros, flores y gratas terrazas. Al mediodía se puede comer en menú en el bar-restaurante The Clinic, siempre lleno por su ambiente cultural y popular. Este bar está asociada a una famosa revista de sátira política de gran éxito.
En el corazón de este barrio está la Plaza el Mulato Gil, con museos gratuitos el de Arte Visuales y el Museo Arqueológico de Santiago, con anticuarios a las puertas de esta coqueta y mínima plaza. En la esquina hay una antigua casona en cuyo interior hay varias tiendas de diseño de moda y complementos, únicos y originales que merecen mucho la pena.
Tras atravesar el Parque Forestal y uno de los puentes que atraviesa el río Mapocho (de aguas chocolates por la contaminación) se llega al Barrio Bellavista a los pies del cerro San Cristóbal, sin duda, lo mejor visitar “la chascona” la casa de Pablo Neruda, a los pies del cerro. Luego subirlo merece la pena por las vistas panorámicas de Santiago que permite desde esa altura ver los diferentes paisajes de una ciudad extensa y marcada por muchas diferencias arquitectónicas, a veces de no mucha armonía, y también social.
Bajando del cerro la calle Dardignac está lleno de bares, pub y tiendas dignas de conocer por su apuestas creativa, lúdica en algunos casos. Destacan restaurantes tradicionales como “El galindo” o tiendas nuevas como “Petit Palermo” o conocer el Patio Bellavista donde además de la oferta gastronómica hay una gran apuesta por la artesanía de lapislázuli y en general de la amplia gama de minerales chilenos y otros productos típicos del país.
Recomendaciones
Comprar la fina artesanía de la lapizlazuli, la piedra azul, ya que es uno de los dos países del mundo donde se encuentra esta piedra. También las artesanías en cobre, madera y otros minerales destacan en complementos.
A nivel de comida hay una gran gama de productos envasados de mariscos y pescados como centollas, locos, jaibas, machas, etc. además de chocolates caseros realizados con la recetas típicas de la colonia alemana del sur de Chile, al igual que los mazapanes.
Para comprar ropa lo mejor son las pequeñas tiendas del Barrio bellavista y del Bario Lastaria, ya que son hechas por diseñadores independientes que apuestan por piezas únicas.
Abundan los grandes centros comerciales como el Ato Las Condes o el mall Parque Arauco (Chile en un país muy seguidor de la cultural grandes superficies) en el Barrio Alto, pero ahí se encontrarán la repetición de tiendas con marcas internacionales que se pueden encontrar en cualquier lugar del mundo.
Fuentecilla en medio del Mercado Central. Imagen de Beatriz Alvarez Sánchez. Guiarte.com Copyright
Pescados en el Mercado Central. Imagen de Beatriz Alvarez Sánchez. Guiarte.com Copyright
Los barrios modernos de Santiago poseen magníficos edificios, buenas tiendas y excelentes restaurantes. Imagen de Beatriz Alvarez Sánchez. Guiarte.com Copyright
Restaurante en el Mercado Central. Imagen de Beatriz Alvarez Sánchez. Guiarte.com Copyright
Direcciones de interés
Direcciones interesantes para el viajero en la ciudad de Santiago de Chile.
Museo Histórico Nacional: Plaza de Armas N° 951. Costado norte de la Plaza de Armas. Fono: 4117010
Museo Nacional de Bellas Artes. Parque Forestal s/n. Teléfono 4991600
http://www.municipalidaddesantiago.cl/
http://www.aeropuertosantiago.cl/
Puesto de frutas en el Mercado Central de Santiago de Chile. Imagen de Beatriz Álvarez Sánchez. Guiarte.com Copyright