Lo clásico y la ruptura, el pasado, los pintores, la arquitectura y la estatuaria... Picasso arrancó de un mundo artístico tradicional para subvertirlo, sentando los pilares básicos del arte moderno con su implantación del cubismo, indica la nota de presentación de esta muestra.
Maestro joven y académico (condecorado con una medalla a la edad de 19 años) y destructor de las formas establecidas, Picasso mantuvo sin interrupción un diálogo con la mejor tradición de la pintura. Su postura no es (como en otros artistas de su generación), el reflejo simple de una época de cambio, sino un elemento motor y constitutivo del mismo, a través de su proyecto pictórico.
Rafael, miguel Angel, Vélazquez, Tiziano y Rembrandt permanencen en el trasfondo de sus obras, en los retratos de majas, músicos o toreros y en su afición al autorretrato. Pero junto a la influencia clásica, tambien hay una revisión a la luz de pintores más modernos, como Delacroix o Manet.
La exposición Picasso y los maestros, en el Grand Palais, reúne unas 210 obras llegadas de las colecciones más prestigiosas, públicas y privadas, nacionales e internacionales y sirve para confrontar pasado y presente.
La exposición presenta un recorrido que vincula -temática o cronológicamente- la obra picasiana y las de El Greco, Vélazquez, Goya, Zurbarán, Ribera, Melendez, Pussin, Le Nain, Dubois, Chardin, David, Ingres, Delacroix, Manet, Courbet, Lautrec, Degas, Puvis de Chavannes, Cézanne, Renoir, Gauguin, Rousseau, Tiziano, Cranach, Rembrandt, Van Gogh. Mestros españoles, franceses, italianos y alemanes forman la trama de influencias.
Picasso practica un "canibalismo pictórico sin precedente" con su "pintura de la pintura". El autor toma el motivo, lo reinterpreta con nuevas formas, lo "destila" para extraer una nueva visión, a veces perversa y otras irónica.
Simultáneamente, se presentan en París otros dos conjuntos temáticos: en el Louvre, se trata de la visión picasiana de Las Mujeres de Argel, de Delacroix; y en el museo de Orsay, alrededor de El almuerzo campestre (Déjeuner sur l´herbe) de Manet.
En el caso de las Mujeres de Argel, se pueden ver unas 20 variaciones debidas a Picasso, (1954-55) a partir de una obra de Delacroix, de 1834.
En el Orsay, son unos cuarenta trabajos de Picasso, de 1954 a 1962, sobre la conocida obra de Manet: El almuerzo campestre, de 1863.
Nu couché. Pablo Picasso. Musée Picasso, Paris.
Maja desnuda. Francisco de Goya. 1797-1800. Museo Nacional del Prado, Madrid.