Madrid 30 de enero de 2013
La Feria se presenta en un espacio expositivo que se ha reducido casi un 10 por ciento respecto al año pasado debido a los recortes de las comunidades autónomas y otras ausencias exteriores, entre las que se nota la francesa y la chilena, además de algún caso como Siria, que, en plena guerra civil, poco puede esperar de una feria turística.
Además de la baja de inversiones de las comunidades españolas, que alcanzan hasta un 50 por ciento en algunos casos, también baja el “espectáculo”. De hecho, muchos políticos aprovechaban la feria de Madrid para darse unas vacaciones pagadas por la capital del país, programando un sinfín de actos de elevado coste y escasa repercusión mediática y comercial.
La presencia de empresas ha descendido un 5,5 por ciento en comparación a 2012. Pesa sobre el ambiente la escasa demanda interior turística española.
Están abiertos ocho pabellones -uno menos que el año anterior- en los que se presentan los puestos de los distintos estados, gobiernos regionales, instituciones turísticas y empresas. Hay representaciones o negocios de 167 países.
La feria se desarrollará desde hoy hasta el próximo 3 de febrero. Los tres primeros días enfocados a los profesionales del sector turístico y el fin de semana para el público general.
Ante la debilidad de la coyuntura, la Feria trata de abrir nuevas brechas comerciales, tales como el enoturismo, y fomentar negocios como las “escapadas”. Los organizadores creen que alcanzarán los 200.000 visitantes y quieren que este sea un importante encuentro de negocios para el mercado latinoamericano.
Hoy mismo, se han conocido las previsiones del turismo internacional para 2013. Son buenas. Las llegadas de turistas internacionales crecieron un 4 por ciento en 2012 hasta alcanzar los 1.035 millones, y se espera que en el 2013 la tendencia sea similar.
La Organización Mundial del Turismo (OMT) ha dado a conocer su último Barómetro del Turismo Mundial. En el mismo se ve que el alza del turismo en las economías emergentes (+4,1 por ciento) volvió a situarse por delante de las avanzadas (+3,6 por ciento), siendo la región de Asia y el Pacífico la que arrojó los mejores resultados.
En 2013 se espera que el crecimiento se mantenga a un ritmo solo ligeramente inferior al de 2012 (entre un 3 y 4 por ciento) y en sintonía con la previsión a largo plazo de la OMT.
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