El Museo de la Biblioteca Nacional analiza la figura y la obra de Espronceda, con motivo del bicentenario de su nacimiento, en la exposición JOSÉ DE ESPRONCEDA. POETA Y MILITANTE (1808-1842). La muestra se divide en tres apartados –La figura de Espronceda, La obra poética y dramática y Las ideas sociales y políticas– e incluye pinturas, litografías, fotografías, manuscritos y diversas ediciones de las obras del poeta. Entre las piezas expuestas destacan el retrato al óleo firmado por José María Esquivel o la fotografía de Charles Clifford de El cuadro de los poetas, en el que aparecen reunidos los más ilustres representantes del movimiento romántico.
La literatura romántica tiene en José de Espronceda uno de sus más insignes representantes en España. Su temprana muerte no impidió que pasara a la historia de la literatura como uno de los mejores poetas de todos los tiempos.
Rodeado de una leyenda que fomentaron sus primeros biógrafos, se le ha atribuido una vida desordenada y un tanto excéntrica que la investigación histórica ha contribuido a desmentir. No fue un don Juan, como uno de los personajes de El estudiante de Salamanca, pero vivió no pocas aventuras y trances, políticos y personales, y murió el mismo año en que había sido nombrado diputado a Cortes, a los treinta y cuatro años, dejando inacabada su mejor obra, El diablo mundo, un extenso poema, compuesto por seis cantos y una introducción, de carácter filosófico y moral, con una concepción pesimista del universo, en el que intenta desarrollar la idea del hombre en el mundo acechado por todo tipo de pasiones y tentaciones. El amor, la gloria y los bienes no sON más que un engaño puesto ante los ojos del hombre, que termina amargado por la imposibilidad de acceder a todo ello.
Los temas e ideales del romanticismo están presentes en toda su obra: noche, luna, viento y tempestad, Oriente lejano y exótico. El amor y la gloria son las metas del hombre en el romanticismo, pero en la obra de Espronceda destaca el predominio de lo social sobre lo individual, la necesidad de un gobierno capaz de dirigir al pueblo, la importancia de la moralidad en la administración y la vida pública.
Autor de una única novela, de tema histórico, Sancho Saldaña, de numerosos artículos de costumbres y de crítica literaria y de obras de teatro de valor desigual, su verdadero mérito está en la poesía, “auténtica y maravillosa poesía, hecha de música, sentimiento y humor pesimista”.
Desde la publicación de sus Poesías en 1840 fue conocido y admirado por ellas. Sus versos han llegado a nosotros como la poesía popular, que se recuerda, se imita y se recita de memoria, con independencia del nombre de su autor. El Himno al sol, la Canción del pirata, el Canto del cosaco o el Canto a Teresa son poemas sentidos y recitados en nuestros días.
Horario de la exposición:
Martes a sábados: de 10 a 21 h.; domingos y festivos: de 10 a 14 h.; lunes, cerrado.
Último pase media hora antes del cierre. Entrada gratuita.
Distintas visiones de un genio de la literatura.