Nueva York, 22 de marzo de 2014
El agua es un elemento clave del desarrollo sostenible. Este año 2014, la Organización de las Naciones Unidas hacen énfasis en el nexo agua-energía, abordando en particular las desigualdades, especialmente para una gran parte de la población que vive en barrios marginales y zonas rurales empobrecidas sin acceso al agua potable, al saneamiento adecuado, alimentos suficientes y servicios energéticos.
Esta jornada invita a realizar una mejor práctica del uso del agua y la energía, a través de pequeños gestos como no poner el lavavajillas o la lavadora hasta que no estén llenos, o no dejar el agua correr mientras nos cepillamos los dientes o nos duchamos.
Además, es aconsejable mantener de forma adecuada las instalaciones de fontanería de nuestra casa. Gran parte del agua que llega a los hogares para consumo doméstico se pierde a través de fugas, roturas o averías. Una fuga en la cisterna puede gastar unos 2.000 litros de agua al año. Un gran gasto para el bolsillo, pero además un gran malgasto de los recursos naturales.
A nivel mundial, 1,3 mil millones de personas no tienen acceso a la electricidad, 768 millones de personas carecen de acceso a fuentes mejoradas de agua potable y 2,5 mil millones de personas no tienen acceso a servicios de saneamiento. El agua y la energía tienen impactos importantes sobre el alivio de la pobreza.
Una mejor vinculación entre los sectores de agua y energía mejorará la coordinación en materia de energía y planificación del uso del agua, dando lugar a la reducción de ineficiencias. La Organización de las Naciones Unidas insta a crear las políticas innovadoras y pragmáticas, necesarias para garantizar que el agua y la energía sostenibles estén al alcance de todos, y no solo de unos pocos.
Objetivos del Día Mundial del Agua en 2014
Aumentar la conciencia de las interrelación entre el agua y la energía
Contribuir a un diálogo político que se centra en la amplia gama de temas relacionados con el nexo de agua y energía
Demostrar, a través de estudios de casos, a quienes toman decisiones en el sector energético y en campo del agua, que los enfoques integrados al examinar los problemas energéticos del agua pueden lograr mayores impactos económicos y sociales
Identificar la formulación de políticas y los temas en los que la Organización de las Naciones Unidas, en particular ONU-Agua y ONU- Energía, puede ofrecer importantes contribuciones
Identificar los principales actores en el nexo agua-energía y asegurar su participación activa en el desarrollo ulterior de los vínculos energéticos agua-energía
Contribuir en las discusiones posteriores a 2015 (objetivos post-milenio) en relación con el nexo agua-energía.
Exhuberancia en Barra da Lagoa (Isla de Santa Catarina, Brasil). Imagen de Guiarte.com
El contraste en Etiopia, donde la pobreza se encuentra vinculada a la falta del agua potable. Foto de Intermón Oxfam