madrid 8 de mayo de 2013
El objetivo de esta muestra es posicionar a la figura de Pissarro (Jacob Abraham Camille Pissarro), injustamente debilitada ante las de otros grandes artistas entre los que fue considerado como maestro e impulsor del Impresionismo.
Para ello se reunen 80 obras prestadas por museos y coleccionistas de todo el mundo, una colección en la que el paisaje es elemento que centra el recorrido, articulado en orden cronológico, en función de los lugares donde el pintor residió y trabajó.
Comisariada por Guillermo Solana, la exposición se presenta primero en Madrid, del 4 de junio al 15 de septiembre de 2013, y a partir del 15 de octubre en CaixaForum Barcelona.
Camille Pissarro nació en las Antillas, de una familia con sangre portuguesa, judía y dominicana. Fue una figura importante del Impresionismo y, a la vez. de las menos reconocidas. Su carrera sería eclipsada por el inmenso éxito de su amigo Claude Monet. Para hacerle justicia, en esta exposición se intenta restaurar la reputación de Pissarro no sólo como "el primer impresionista", sino también como maestro de los pioneros del arte moderno.
El maestro
Camile Pissarro ha sido descrito como el "decano" o el "patriarca" del Impresionismo debido a que era el de mayor edad del grupo y el de mayor autoridad entre los artistas más jóvenes.
Pissarro fue puente entre los grandes pintores franceses de mediados del siglo XIX y los artistas postimpresionistas del final de siglo. Entre otros, dos grandes pioneros de la modernidad, Cézanne y Gauguin, fueron en alguna medida discípulos suyos: Ambos trabajaron temporadas junto a él y aprendieron mucho de sus consejos.
Pissarro enseñó a Cézanne la técnica impresionista cuando pintaban juntos a orillas del Oise, hacia 1873‐1874. Después llegaría Gauguin quien heredó de él el sentimiento de la vida rústica. También se beneficiaron de su apoyo Seurat, Signac y los jóvenes pintores neoimpresionistas.
Pintor de la naturaleza rústica
De ideas reivindicativas en lo social, Pissarro se interesó por el campesinado. Desde las primeras apariciones públicas del grupo impresionista, la crítica le consideró como un paisajista rural, oponiéndolo al refinamiento parisiense de Monet y otros.
Así como los paisajes de Monet, Renoir y Sisley suelen representar los escenarios del ocio de la burguesía, los de Pissarro, en cambio, suelen tener como protagonista, explícito o implícito, el trabajo rural. En vez de pintar praderas prefiere los campos arados, en vez de los jardines decorativos, huertos inspirados muchas veces en el de su propia casa.
En uno de los primeros comentarios sobre la pintura de Pissarro, …mile Zola escribía sobre sus cuadros: "En ellos se oyen las voces profundas de la tierra, se adivina la vida poderosa de los árboles".
Si hay un motivo dominante en la pintura de Pissarro, es el del camino. Carreteras, calles de pueblos y modestos senderos que cruzan los campos, invitan a adentrarnos en el espacio del cuadro. A veces el camino se presenta en una perspectiva recta; otras, el pintor se complace en la senda que bordea un huerto o en la curva de una carretera, motivos que multiplican las posibilidades pictóricas. En ocasiones, el curso de un río hace el oficio de un camino, sirviendo de nuevo para permitir al espectador ingresar en el espacio pictórico.
Más tarde, también en sus paisajes urbanos, se concentrará en las grandes vías en perspectiva, como en sus vistas del Boulevard Montmartre o de la Avenida de la ”pera. Sin embargo, en estas vistas tiene presencia clave la naturaleza: los árboles, la nieve que enfría el espacio.
Tras décadas de entrega al paisaje rural, en los años 1880 Pissarro comienza a explorar el mundo del paisaje urbano y el último tramo de su carrera (1893‐1903) está dominado por las vistas de ciudades: París, Londres, Rúan, Dieppe y El Havre.
No duda en reclamar también el valor de las calles urbanas anodinas, aparentemente. En una carta se entusiasma con "estas calles de París que se tiene la costumbre de llamar feas, pero que son tan plateadas, tan luminosas y tan vivas".
En 1896 y 1898 se instala en Rúan y pinta sus puentes y los nuevos aspectos industriales de una ciudad de la era gótica. En julio de 1903, su última serie estuvo dedicada al puerto de Le Havre, el mismo al que había arribado casi medio siglo antes en un vapor que venía de América.
Una autobiografía breve
Escribió Pissarro: "Esta es mi biografía: nacido en St‐Thomas (Antillas danesas) el 10 de julio de 1830. Vine a Paris en 1841 para entrar en la pensión Savary en Passy. Al final de 1847 regresé a St‐Thomas, donde comencé a dibujar mientras estaba empleado en una casa de comercio ‐en 1852 abandoné el comercio y partí con Fritz Melb¤e, pintor danés, para Caracas(Venezuela) donde me quedé hasta 1855, [en que regresé a París] a tiempo para pasar tres o cuatro días en la Exposición Universal. A partir de entonces me establecí en Francia. En cuanto al resto de mi historia de pintor, está vinculada al grupo impresionista."
Camille Pissarro. Louveciennes, nieve. 1872. Museo Folkwang. Essen, en la exposición del Thyssen Bornemisza.
Camille Pissarro.La forrajera. 1884. Colección Pérez Simón, México, en la exposición del Thyssen Bornemisza.
Camille Pissatto. Monmartre, mañana de invierno. 1897. Prestamo de Metropolitan Museum of Art, Donación Katrin S Victor, en la exposición del Thyssen Bornemisza.