Madrid, 1 de octubre de 2013
El pigargo europeo, la cigüeña blanca, el águila imperial ibérica, el milano real, el castor euroasiático y el bisonte son algunas de las 37 especies más favorecidas.
El pigargo europeo, una de las mayores rapaces del mundo, ha experimentado una impresionante recuperación a partir de su dramático declive y extinción en muchos países entre 1800 y 1970. Gracias a su protección legal, la población europea ha pasado de menos de 2.500 parejas en 1970 a 9.600 en 2010, y ha recolonizado parte de su antigua área de distribución en el centro y norte de Europa.
Otro ejemplo es el bisonte europeo, el mayor herbívoro del continente, extinguido en estado salvaje a principios de siglo XX debido su caza y la pérdida de hábitat. Tras un programa a gran escala de cría en cautividad y reintroducción, sus poblaciones se han estabilizado en áreas del centro y este de Europa, con poblaciones afianzadas en Polonia y Bielorrusia. Ahora su población total roza los 3.000 individuos.
Del listado, algunas especies de aves están muy presentes en la Península Ibérica, como la malvasía cabeciblanca, la cigüeña blanca, la espátula, el cernícalo primilla, el halcón peregrino, el milano real, el quebrantahuesos, los buitres negro y leonado, la grulla común o la endémica águila imperial ibérica. Entre los mamíferos, el rebeco pirenaico, el ciervo común, el lobo y el oso pardo también están presentes en la península Ibérica. Con respecto al lince ibérico el informe señala que su población ha disminuido gravemente desde el año 1960, pero ha mejorado ligeramente en la última década gracias a los planes de recuperación de la especie.
En el informe sobre la situación en España, ha participado SEO/BirdLife, integrada en la organización BirdLife Internacional.
Los miembros de las instituciones científicas y conservacionistas han trabajado con expertos de toda Europa para reunir información sobre la distribución y abundancia de una lista de especies que habían disminuido alarmantemente o que habían llegado a estar en estado crítico desde el año 1960. El informe resultante,Wildlife Comeback in Europe (La vida silvestre retorna en Europa), describe las causas que han llevado a la recuperación de 19 aves y 18 mamíferos en el último medio siglo en el continente europeo, así como los lugares donde se ha producido esta mejora y los territorios perdidos. El informe destaca que las lecciones aprendidas en la conservación de estas especies podrían extrapolarse para recuperar otras también amenazadas.
Las especies estudiadas en el Wildlife Comeback in Europe han sido:
Entre las aves: ánsar piquicorto, barnacla cariblanca, cinsne cantor, malvasía cabeciblanca, cigüeña blanca, espátula común, pelícano ceñudo, cernícalo primilla, halcón sacre, halcón peregrino, milano real, pigargo europeo, quebrantahuesos, buitre negro, buitre leonado, águila imperial ibérica, grulla común y charrán rosado.
Entre los mamíferos: bisonte europeo, íbice, cabra montés, rebeco (spp. norteña y sureña), ciervo, corzo, alce euroasiático, jabalí, chacal dorado, lobo, lince ibérico, lince euroasiático, glotón, foca gris, foca común , oso pardo y castor europeo,
Sobre estas especies, Rewilding Europe está presentando una exposición fotográfica en distintos países. Esta muestra viaja por lugares como Berlín, Madrid y Copenhague.
Datos con cautela
La recuperación de la fauna no se limita a las especies presentadas en este estudio. Hay muchas más que muestran patrones similares de recuperación. Sin embargo, a pesar de la mejora de este impresionante número de aves y mamíferos, la biodiversidad, en su conjunto, se está perdiendo. Por ello los expertos advierten de que los resultados del estudio deben revisarse en el contexto de un largo declive histórico.
Para carnívoros como el lince euroasiático o el lobo, y muchas especies de aves, como el milano real, tanto en su distribución y abundancia habían disminuido drásticamente desde mediados del siglo XX. La mejora de la fauna silvestre debe por tanto valorarse con cautela, ya que muchas especies aún no han alcanzado los niveles necesarios que aseguren la sostenibilidad de poblaciones.
Además, como explica Eduardo de Juana, presidente de SEO/BirdLife, en su tribuna del último número de la revista Aves y naturaleza, resulta difícil dejarse llevar por el triunfalismo, porque en un mundo globalizado como el nuestro los impactos sobre el medio ambiente ocurren en todas partes y, en ocasiones, a larga distancia. El consumo en una parte del planeta puede deberse a la explotación de recursos en el otro extremo.
Grupo de pelícanos dalmatas (Pelecanus crispus)en el lago Kernini Macedonia. La especie está creciendo en efectivos en los últimos 30 años. © Jari Peltomäki/Wild Wonders of Europe, info@wild-wonders.
Ejemplares de bisonte europeo (Bison bonasus) en el bosque de Bialowieza, Polonia. Stefano Unterthiner/Wild Wonders of Europe.+46-8-583 518 31.staffan@wild-wonders.com.www.wild-wonders.com