Restos de San Felix, o Felices, ya en las cercanías de Villafranca. Foto guiarte-Alex Moreno.
La carretera nacional articula el entramado urbano de Villafranca Montes de Oca. Guiarte.com/José Holguera (www.grabadoyestampa.com)
Villafranca Montes de Oca. iglesia parroquial, dedicada a Santiago. Guiarte.com/José Holguera (www.grabadoyestampa.com)
Entrada al hospital de peregrinos de San Antonio. Guiarte.com/José Holguera (www.grabadoyestampa.com)
Ermita de Valdefuentes, cerca de Villafranca Montes de Oca, Burgos. Guiarte.com/José Holguera (www.grabadoyestampa.com)
Por Artemio Artigas
En el Camino De Santiago a su paso por la provincia de Burgos, a unos 35 kilómetros de la capital provincial está Villafranca Montes de Oca, en la comarca de Montes de Oca.
El nombre de Oca deriva de una población romana -Auca- que incluso llegó a ser sede episcopal, pero cuya ubicación concreta apenas se conoce.
El lugar tiene interés, pese que no llega a los 200 habitantes. Está en una zona montuosa y con clima frío, ya que se halla a 950 metros sobre el nivel del mar. La explotación agroganadera es su fuente de vida económica.
La carretera Nacional Logroño-Vigo articula la estructura de la población, pasada la cual se inicia la ascensión de La Pedraja.
La iglesia parroquial, dedicada a Santiago, es básicamente del siglo XVII. El templo es de una sola nave y planta de cruz latina. En su exterior destaca la sólida torre, de excelente cantería y una portada clasicista y austera. En su interior, el retablo romanista de la Ascensión y una enorme concha donde se deposita el agua bendita.
Tiene también interés el hospital de peregrinos de San Antonio Abad, originario del siglo XIV y con obra de la Edad Media y posterior, que ahora compatibiliza las instalaciones de hotel y albergue. La entrada al recinto aún luce un escudo de la época de los Reyes católicos, con el águila bicéfala coronada
En el libro "El Camino de Santiago para paganos y escépticos", el escritor y periodista Tomás Alvarez, realiza la siguiente descripción de este entorno:
"Villafranca Montes de Oca surgió como punto clave del Camino de Santiago, por estar en medio del trayecto Santo Domingo-Burgos, y como base de partida para atacar el cruce de los montes, boscosos y llenos de bandidos.
La población responde a ese origen, tanto por su forma alargada como por la bondad de su hospital, más generoso en comida que en ropa de cama, a juzgar por el refranero. Villafranca Montes de Oca, alta de camas y pobre de ropa.
El templo parroquial de Santiago (siglo XVII) sustituyó a una antigua iglesia levantada sobre el solar de la catedral. Muy cerca se encuentra el Hospital de San Antonio Abad, valioso y mal conservado, fundado por la esposa de Enrique II en 1.380, centro que en recuento del siglo XVIII contaba con 36 camas.
Villafranca heredó de la romana Auca su prestigio histórico y fue sede episcopal hasta 1.075, cuando pasó a Burgos. A la salida de la pequeña población está la Ermita de la Virgen de Oca, paraje evocador donde -según la tradición- fue martirizado San Indalecio, discípulo de Santiago y primer obispo de Auca.
El bosque actual de la zona es en buena parte resultado de repoblaciones, pero aún hay enclaves de valor ecológico, con interesantes robledales. Más al sur perduran hayedos y abedulares, en soledades verdes por las que aún corren los corzos y lobos, y en cuyas aguas frías se escurren las nutrias.
Si el viajero no tiene prisa puede realizar alguna excursión por la sierra de la Demanda, hasta las estribaciones del San Millán. Si se conforma con un pequeño paseo, resulta agradable acercarse al desfiladero del rio Oca, aguas arriba de la ermita. Pero debe ir preparado también para sorpresas desagradables, pues descubrirá una presa en construcción, que estropeará el ameno valle donde se encuentra el despoblado de Alba.
El Camino sigue entre montes. Es terreno apto para el bandidaje, como lo prueban las citas históricas que hablan de asaltos a peregrinos. Aún hoy, es frase conocida en Castilla: Si quieres robar, vete a Montes de Oca, con la que se protesta por cualquier precio abusivo.
En las cercanías del Camino estaba el poblado de Valdefuentes, con priorato y hospital cisterciense, fundado en el siglo XII. Hoy no queda nada, salvo el ábside de la iglesia de Santa Magdalena, en medio de un valle solitario."
Del libro, El Camino de Santiago para paganos y escépticos, de Tomás Alvarez, Editorial Endymion. Madrid.
