Bogotá, 7 de septiembre de 2001
Dos circunstancias hicieron de Jorge Obando uno de los fotógrafos más reconocidos de América Latina durante la primera mitad del siglo XX: su cámara Cirkut Eastman Kodak, una extraordinaria maquina que giraba 360 grados sobre su eje, y su cercanía con el entonces presidente Pedro Nel Ospina, pues era esposo de una de sus sobrinas.
Una muestra de sus fotografías, que retratan la agitación social y la cotidianidad de la clase alta de los años 30 en Colombia, puede apreciarse en la exposición Gabinete de Jorge Obando: fotografías de un país en transición 1925 - 1957, abierta en la Casa de Moneda.
En 1923 Jorge Obando abrió su primer estudio fotográfico en el centro de Medellín, aunque en la ciudad ya existía un negocio de daguerrotipos, rápidamente sus fotografías se destacaron por la cuidadosa composición, especialmente la de los retratos la clase alta de la ciudad.
Sin embargo fue en 1930 cuando registró, con una cámara Cirkut Eastman Kodak que le compró a un turista alemán, la bienvenida que se le dio al entonces candidato del partido liberal Enrique Olaya Herrera en la plaza Cisneros de Medellín, cuando se propagó su fama como fotógrafo.
La imagen panorámica mostró a centenares de personas atiborradas ante las palabras del postulante, que marcaría el fin de la hegemonía conservadora y convertiría a Obando en el fotógrafo oficial de los eventos presidenciales, no sólo de Olaya Herrera, también de López Pumarejo, Santos, Ospina Pérez, Laureano Gómez y Rojas Pinilla.
Sin proponérselo, Obando se convirtió en uno de los pioneros de la reportería gráfica en el país, sus imágenes aparecieron en varios medios nacionales- que recién implementaban y disfrutaban de la popularidad que trajeron consigo las imágenes impresas- y en varios internacionales. Por su lente, quedaron registrados acontecimientos sociales de todo tipo, desde las congregaciones y manifestaciones de la llamada Revolución en marcha que se dieron durante la presidencia de López Pumarejo, el accidente aéreo en que murió Carlos Gardel en 1935 y un decenio de fiestas y eventos religiosos.
Algunos expertos le vincularon al Art Deco. El historiador de arte Carlos Arturo Fernández resalta: “Una de las tantas características del Art Deco es la repetición de motivos que tienden a organizarse en series modulares. Entre cada elemento de la serie, la variante es mínima -si la hay- y su organización general obedece a ejes rectilíneos. Pues bien, es exactamente esto lo que buscó y halló Obando”.
Manifestación al Dr. Enrique Olaya Herrera. Pza. Cisneros. Medellín. Jorge Obando