Patrimonio de Aranjuez
En Aranjuez hay que conocer los edificios y jardines reales. Tienen una belleza apacible, un acierto aire huertano, acorde con el paisaje y con el hecho de que esta residencia real estuviera concebida como lugar para pasar la primavera.

Pero el pueblo de Aranjuez tiene también sabor, con su estructura urbana radial y rectilínea, con sus viejos edificios de los días dorados de la monarquía borbónica.
El ensanche del pueblo, fraguado en 1765, se encaminó a hacer del pueblo una ciudad moderna y funcional. Por ello se contó pronto con servicios o instalaciones para matadero y plaza de toros.
Al abrigo de esta ordenada estructura se ubicaron casas palaciegas como las de Medinaceli, Osuna y Godoy.